En una reciente entrevista, el tenista serbio Novak Djokovic compartió una anécdota divertida y reveladora sobre su primera cita con su esposa, Jelena. A pesar de ser una de las parejas más queridas del mundo del deporte, su inicio no fue tan perfecto como muchos podrían imaginar.
Djokovic recordó cómo, en su primera cita, decidió impresionar a Jelena pidiéndole un plato sofisticado: steak tartar. Sin embargo, no se dio cuenta de que este plato consiste en carne cruda, algo que podría haber provocado una reacción inesperada en su cita. “No tenía idea de que la carne estaba cruda”, confesó Djokovic, añadiendo que su falta de conocimiento sobre la gastronomía en ese momento casi arruina la velada.
La sorpresa de Jelena al ver el plato fue evidente, y la situación se tornó un poco incómoda. Sin embargo, lo que podría haber sido un desastre se convirtió en una oportunidad para reírse juntos. A pesar de la metedura de pata, ambos compartieron momentos de diversión y complicidad, lo que ayudó a suavizar la tensión inicial.
Djokovic enfatizó que, a pesar de este tropiezo, su relación se ha fortalecido con el tiempo. La honestidad y el sentido del humor son pilares fundamentales en su matrimonio, y esta experiencia se ha convertido en una anécdota que ambos recuerdan con cariño.
Hoy en día, Novak y Jelena son inseparables, apoyándose mutuamente en todas las etapas de la vida, tanto dentro como fuera de las canchas. La historia de su primera cita es un recordatorio de que, a veces, los errores pueden llevar a momentos inolvidables y a un amor más profundo.
A medida que Djokovic continúa su exitosa carrera en el tenis, su relación con Jelena sigue siendo una fuente de inspiración para muchos, mostrando que el verdadero amor puede superar incluso las situaciones más inesperadas.
